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<<En nuestra UVI se hallaba ingresado Adrián, un niño de corta edad que había sufrido una grave traumatismo, miembro de una familia en la que había otros hermanos, su mamá se encontraba en avanzado estado de gestación. Su padre, profundamente afectado, daba claras muestras de rechazo a la remota posibilidad de encontrarse con un hijo con graves secuelas neurológicas de por vida, si es que superaba la situación. Con suma discreción, nos había ido dando muestras de su deseo de que pusiéramos fin a su existencia:
“Su vida ya no tiene ningún sentido para mí, ni para su madre, ni para sus hermanos, ni para el que viene de camino, ni para él mismo.”
En una planta del Hospital, a pocos metros de Adrián, se encontraba ingresada Elena, una niña afectada por una severa encefalopatía. Hija única de madre soltera, su calidad de vida podía parangonarse a la que pudiera preverse en el futuro, para Adrián. Con regular frecuencia sufría unos determinados procesos que obligaban a trasladarle a la UVI para su atención. Elena es una vida irremplazable para su madre; lo es todo. Ella representa su soporte afectivo y emocional, la razón de su existir, y el único medio de vida para la misma: sumida en el paro –y sin subsidio alguno-, viven ambas de las ayudas que han obtenido de diversos organismos oficiales.
-“Mi hija no puede morir.”
Para Adrián se nos está solicitando, larvadamente, la aplicación de eutanasia. Con Elena quizá se nos está obligando a desarrollar un cierto encarnizamiento terapéutico.
Objetivamente la calidad de vida de Adrián y de Elena no ofrecían diferencias substanciales. Subjetivamente, la valoración era profundamente dispar: la de aquél era despreciable, la de ésta, innegociable.
En medio de tan distantes valoraciones, se ubican las preguntas:
¿Cuál es el valor real de la vida humana?, ¿Queda ésta a merced de los criterios subjetivos que se puedan tener sobre la misma?, ¿es que tales criterios carecen en absoluto de valor alguno?, ¿pueden reemplazar a los datos objetivos que sobre dicha vida humana nos ofrece la ciencia? |
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